Un blog de poesía sencilla y otras cosas para todos aquellos a los que les guste apoyarse, al menos una vez al día, en el alféizar de una ventana a ver pasar la vida.

Meditaciones sobre elecciones equivocadas...

PODREDUMBRE


El castigo de los Ladrones (Grabado de William Blake)


Si me cubro la cara
-para no verlo-
no es que sea cobarde.
Entiéndeme,
ponte en mi lugar,
la miseria de lo que me rodea me ha superado.
Si no descuelgo el teléfono
cualquier viernes de una semana cualquiera
no es que sea mezquina.
Entiéndeme,
ponte en mi lugar,
los años entre la basura me han transformado. 
Si los muros que me rodean
no te dejan ver mi rostro
no es que no esté cerca.
Comprende que lo sórdido
-todo aquello que ensucia las calles-
me ha rozado.
Así que no me juzgues tú,
que subsistes entre paredes blancas
y te desperezas entre sábanas almidonadas,
tú que decidiste vivir
en un mundo inmaculado
de falsa perfección y podredumbre perfumada.
Tú no puedes juzgarme.
-para mi-
eres menos que nada.




3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Me ha gustado el poema, es tiernamente contradictorio: demasiados mensajes para alguien que es menos que nada. Saludos.
    rUBEN:cORMORÁN.

    ResponderEliminar
  3. Gracias por tus palabras, es cierto, las contradicciones dominan mi vida y muchas veces dominan mis poemas.

    ResponderEliminar