A LA VUELTA DE LA ESQUINA
Un par de zapatos viejos (Van Gogh) |
La encontré a la vuelta de la esquina
arrastrando cansada su tristeza por la acera
envuelta su vida
entre harapos,
-indefensa-
invisible entre las papeleras
gritando en silencio su pena.
Me topé a la vuelta de la esquina
con toda nuestra miseria
y a la vuelta de la esquina,
-desolada-
se fue mi risa con ella.
Y aquel día desperté
- o quizás dejé de estar ciega-
al inundar mis sentidos
el olor amargo y rancio
del frío y la soledad ajena.
Y se fue sin despedirse
sin mirar atrás siquiera
dejándome allí parada
con un agujero en las entrañas
y el hastío deslizándose
-pegajoso-
por mis venas.
Una buena pintura de la antigua, permanente e irremediable miseria. Saludos.
ResponderEliminarrUBEN:cORMORÁN.